Testimonio de Miguel Angel Jimenez
Como darle un nuevo rumbo a mi vida profesional y personal a través de una MENTORIA.
«Conocí a Andrés Navarra en un taller que impartió en una escuela de negocio #EAEBussinesSchool sobre ¨Técnicas de negociación disruptivas¨.
Finalizado el workshop, me dirigí por linkedin a Andrés comentándole que estaba en un proceso de cambio y que necesitaba emprender nuevos caminos, no me refería a crear una startup de base tecnológica, me refería a que quería conquistar nuevos objetivos, establecer nuevas metas profesionales, a encontrar un nuevo propósito en mi desarrollo profesional.
Andrés me contestó que este camino lo podía hacer conmigo a través de Empathikos, que se dedican a acompañar a emprendedores, en este caso a un emprendedor como yo que quería desarrollar un nuevo proyecto, mi proyecto se llamaba: SPV (Su propia vida), con una nueva estrategia.
Estaba claro que yo quería salir de los cánones tradicionales, estaba claro que quería ser disruptor, que entendía que debía cambiar las cosas, buscar otras soluciones, etc. Estos son los hábitos de una persona disruptiva, lo que pasa es que muchas veces uno mismo no lo sabe. No hay secreto para ser una persona disruptiva, lo eres o no lo eres, las buenas noticias es que esta habilidad se puede adquirir.
El resto es historia, o mejor dicho presente pues me he propuesto realizar ese cambio, he tomado medidas proactivas para mantenerme competitivo y estoy disfrutando del proceso y del resultado.
En este acompañamiento de mentoría, he experimentado las siguientes sensaciones y realidades :
1.- La mentoría me ayudo, orientó y guio de forma estratégica para la búsqueda de nuevos retos profesionales y crecimiento personal.
2.- A través de un análisis de valoración personal que personas cercanas a mi circulo definieron de mi persona, me permitió conocer mis fortalezas y debilidades dando lugar a definir mi ventaja competitiva a la hora de ofrecerme a un nuevo proyecto empresarial.
3.- Me dio seguridad y aumentó mi autoestima para proyectarme en puestos que creía no podía optar.
En resumen, la mentoría me proporcionó y marcó una estrategia que considero imprescindible a la hora de nuevos retos”.
Este fue el secreto del proceso, que ahora comienza o sigue según quien lo vea, una estrategia que se sustenta en entender que hemos de buscar ayudas de profesionales bien reputados, serios y con un alto nivel de adaptación a los cambios. La mejor garantía de seguridad que necesitamos ya no depende 100% del otro, del que contrata, sino que depende del esfuerzo y la capacidad que nosotros pongamos en mejorar y en avanzar en nuestros niveles de conocimientos, habilidades y sobre todo de actitud que como dice Victor Kúppers, ¨LA ACTITUD MULTIPLICA¨.